2009/06/29

Los peos de Obama

Poca gente en Venezuela está al tanto de los peos de Obama. Allende la talanquera, más por añeja tradición que por otra cosa, hay un grupo nutrido de huele peos de la Casa Blanca. Supongo que ya se habrán acostumbrado al nuevo inquilino. Aquende la talanquera, el único huele peo confeso de Obama que conozco es Walt Mart y fue recientemente premiado por su gran trabajo de catador. Y eso que se puso cómico... Si no tuviese ese episodio de comicidad en su vitae podría aspirar al rectorado de lo que queda de la Universidad Central de Venezuela. Ego y focas le sobran. Como es natural, los huele peos del huele peo están orgullosos de todo eso. Se siente importantes. Quizás lo sean. Nunca se sabe. "Al mundo le falta un tornillo", decía Cadicamo y cantaba Gardel.

Ventosidades apartes, tenemos que decir que Obama no tiene muchos problemas. La mesa está servida, lo que hay que hacer de importancia está decidido. Los intereses de los Estados Unidos de América, Inc. son claros. El "Chief Executive Officer" que contrataron el año pasado no tiene ni voz ni voto en asuntos verdaderamente importantes. Podrá hacer cosillas por allí para distraer. Vladimir Acosta es de los que dice que le asignaron un presupuesto ilimitado para la compra de tarros de vaselina. No sé cuántos golpes de Estado tienen debidamente planeados para el período 2009-2013. Obama ya le puede poner una rayita a la cacha de su revólver de sheriff. ¿Cuántas más vendrán? ¿Venezuela? ¿Bolivia? ¿Ecuador?

Esa "mamadera de gallo" (Rigoberto Fumanchú dixit) que son los consejos comunales son la garantía de que nos nos pasen la aplanadora. Ahora que los burguesitos problematizados y de maruto rojito -de tanto ráscarselo-, acusan de "religiosos" a todos los muchachos revolucionarios, idealistas y guevaristas, que han aprendido a hacer revolución pateando cerro y en estrecha comunicación con sus organizaciones de base y populares, es menester reconocer el carácter "religioso" de la Revolución (en mayúscula, sin apellidos) y por sobre toda las cosas sus carácter "dogmático" (¡se prohíbe el aire acondicionado!) y su trabajo como "repetidores de experimentos fracasados" en el siglo XX. ¡Joooder!! ¡Cómo coinciden en sus señalamientos (pesamiento crítico) con la propaganda anticomunista de la Central Intelligence Agency!!!

Los saboteadores sabelotodo de todo cuño bien merecen una "misa".

Ruega por ellos, que algo queda...

Manuel Brito