Explico por qué no meto a los españoles y por qué no se trata de un Decreto de Guerra a Muerte. Aunque quién sabe...
¿Qué comen los canarios domésticos? Siempre estará el chistoso que diga que gofio "La Lucha". Pero no me refiero a los oriundos de las Islas Canarias sino a los pajaritos enjaulados. La respuesta correcta es alpiste. Alpistemológicamente hablando, alpiste.
Desde que soy estudiante, conozco acerca de una rama de la filosofía que se ocupa de entender de dónde viene y para dónde va el conocimiento, y que lleva el super-dificilísimo nombre de "teoría del conocimiento". De un tiempo a esta parte, sin embargo, me topo con un grupito de pájaros-bravos que deben ser canarios porque no pueden dar un paso, ni escribir un párrafo, ni poner a temblar la papada, sin sacar la palabrita de la que se alimentan. En orden cronológico y si de canarios se trata, después de alimentarse, lo que viene es cagar la jaula. "Alpistemologia", un vocablo inglés, que deben haberse traído en uno de sus viajes con las bequitas que les dió Carlos Andrés Pérez a los "termocéfalos" de los 70: Fundación Gran Mariscal "¡Toma, cállate y aburguésate!". Y ya con eso tienen para encadilar conejos.
"La crítica epistemológica se ejerza con severidad en todos los campos de la sociedad menos en el campo de la ciencia y la tecnología", te dicen. No sé... ¡Coño!!! La frase me deja triste como pajarito en rama. Como canario sin alpiste. Quizás ahora entiendo por qué a Paolo Coehlo le compran tanto sus libros. Es que es mas fácil entender la lógica de la auto-ayuda: "Lo que ahoga a alguien no es caerse al río, sino mantenerse sumergido en él.".
¡Santa Ana está lejos!!, que algo queda...
Manuel Brito