Pensamiento crítico y crítica constructiva

O podríamos titular: "Arroz con pollo con pollo y mandarriazos amorosos". Y es que "la dinámica" del lenguaje burguesoide, esa que se cuida de no pisar callos, nos lleva a hacer hicanpié donde no hace falta y a intentar suavizar cosas que no deben ser suavizadas. Lo sustantivo del verbo, es decir, el estar sujeto a las viscisitudes adjetivas en conjunción con lo que imponga lo predicado, se desvanece en esta suerte de "decir sin estar diciendo", a la que se referia Andrés Eloy en otro contexto, con otro verbo, y con más delicados versos. Pero es igual de maligna y un día de esto nos mata y no va a ser precisamente dulce esa muerte.

El único pensamiento que no es crítico es conocido en el mundo de la bótanica como Viola tricolor hortensis, y que en rigor debe ser llamada Viola x wittrockiana, según nos apunta el buenazo que escribió sobre pensamientos en la wikipedia. Y abro aquí un paréntesis para llamar la atencion sobre Viola Chilensis, un hermoso documental de Luis Vera sobre mi paisana Violeta Parra.
http://es.arcoiris.tv/modules.php?name=Unique&id=272

Vale la pena acotar que exista gente (¡un decir!) que dice que piensa y que gracias a un nutrido grupo de focas acríticas logre ascender en la pirámide sucial, de suciedad y cretinismo. Ese no es el tema. Ese tópico lo trató con mayor severidad el paisano Pedro Emilio Coll. Sobran los ejemplos, huelgan los dibujitos, pero nunca está de más recordar al toro con el chorrito de agua, propio de cetáceos, saliéndole del lomo.

Crítica constructiva tampoco existe. Crítica viene del griego clásico,
critoris, que quiere decir: ""Deja la paja. Esa vaina no se hace así y si sigues haciéndolo así, te vas a joder y nos vas a joder a todos. Como argumentos a mi favor tengo la historia y la lógica formal y buhoneril".

Propongo que se deseche la "Misión Dr. Scholl" que se dedica a cuidarle los callos a los burguesitos (allende y aquende la talanquera), que los líderes de la misión se incorporen al Plan Revolucionario de Lectura como lectores y que sean sometidos a evaluación continua -y a continua evaluación- para ver si es verdad que entienden lo que leen. Pero no soy exigente, con que no jodan es más que suficiente contribuición a la causa.

¡No se hagan los suecos, doctores Scholl!!, que algo queda...

Manuel Brito