Más leve es mi recuerdo de la forma como decía: "Radio Habana Cuba. Transmitiendo desde Cuba territorio libre en América...". O su famosa frase dedicada a la democracia representativa: "Esto no lo arregla ni Fidel Castro". Cosas que dichas en los años en que Menca de Leoni repartía juguetes en los hospitales públicos podían causarle a cualquiera hijo de vecina -excepto a los aguerridos revolucionarios de "pedigree" y de Jardín Botánico- una desaparicion forzosa.
Poco amigo de las onda corta soy. Pocas veces oí Radio Habana en mis años de formación. Ahora la oigo via red de redes casi a diario. Más y cuando los "dealgunamenara", "quebuenoque" que transmite Radio Nacional de Venezuela me saturan el nivel de tolerancia poco después de la cena (hora Tokyo), cuando ya el compa Ricardo Durán ha dado paso a las noticias y de allí pa'lante que "sealoquediosquiera". Un altar al "comovayaviniendovamosviendo".
Radio Habana Cuba fue fudada en 1961. Soy apenas dos años más viejo. Y hoy día la palabras claves de la información siguen siendo Revolución, Socialismo, Comunismo, formación política, Conciencia, Ciencia... Porque la radio sirve para eso, para formar, para combatir en el terreno de juego las miles de formas que el sistema capitalista tiene para inocular a todos, y en todo momento, con sus valores burgueses. Noticias dadas desde la perspectiva de la Revolución y no simple lecturas de cables internacionales de dudosa veracidad y de hijueputisima redacción. Todas esas palabras claves, toda esa perpectiva en la lectura del hecho noticioso, son -por lo visto y oído- tabúes en ciertos programas en los medios de comunicación del Estado y en ciertos sectores del Estado que consideran importante estar medio comprometidos porque medio conviene y sin correr el riego de ser rechazados por sus iguales, es decir la clase media allende la talanquera. Estar bien con dios, con el diablo y con el portero del purgatorio, que le dicen los metafísicos.
Pasan 45-55 minutos de programación "cultural" sin que se diga Revolución, sin que se diga Socialismo. Y si se dicen es para volverlas un masaclote confuso y esotérico. Sin que se use explícitamente el vocabulario que necesita estar en la boca de todos los que van a defender un proceso político cuyo santo patrón es Sadam Hussein (que Alá tenga en la gloria). Que de no ser por la culebra de los jefes de los Bush con Iraq, ya nos hubiese pasado por encima. Horas tras horas de metafísica, de dioses todopoderosos, de astrología, de "opiniones" de doñitas (dicho sin distingo de género) sin formación política, que se vuelven una estopa de muletillas tratando de explicarse a si mismas en vivo, en directo y en horario privilegiado, de qué va la cosa.
Los que fundaron Radio Habana Cuba sabían cuál era la función de la radio en la consolidación del poder. Quienes heredaron RNV de la cuarta república no saben qué hacer con la papa caliente que es la formación de ciudadanos en Socialismo, ciudadanos libres de todo lastre metafísico y cultores del idioma: la herramienta mas importante en a lucha de los pueblos.
De verdad, compas, ya llegaron al límite de sus capacidades. No esperen a que les pidan la renuncia.
!De pana!, que algo queda...
Manuel Brito