Me cuenta mi madre que hubo una época, que como todas las épocas fue de total desasistencia pública, en la que el cafenol se usaba para todo. La propaganda era buena, y la comercialización, que incluye a la distribución, mejor aún. Tanto así que existía el ABC del Cafenol.
Un perifoneador de Valencia a quien le tocaba dar la propaganda en vivo y en directo -como se hacía antes-, tenía como característica esencial la misma que hoy adorna a los "conductores" y "productores" de programas radiales transmitidos por Radio Nacional de Venezuela entre 8 am y hasta quién sabe qué horas: ¡el desorden!!! O para ponerlo mirandinamente: ¡bochinche!!! Yo dejo de oir radio a la 1 am (hora del Japón) y la verdad es que nunca había visto (¡por radio!!) tantas moscas juntas en un occipucio. Cumplo con decirlo. Cumplo con manifestar mi pesar por el desorden de ideas ("de alguna manera" hay que llamarlas) y la ristra de muletillas, la incapacidad de completar una idea y de transmitir con certitud un mensaje. Los "comunicadores" irrespetan al idioma y a los usuarios y no hay nadie que se los diga porque entre bomberos no se pisan las mangueras. Ergo, ¡los bomberos son reaccionarios que jode!!!
La radio es el medio más poderoso con que que contamos para enseñar a nuestra gente a manejar el idioma, la lógica, la síntesis. La radio no puede ser manejada por elementos que, basados en amistades y en sentimientos, o en lealtades personales "al líder de la Revolución, el comandante Hugo Rafael Chávez Frías" (la única frase corta que dicen sin meter muletillas), reciban cheques en blanco para hacer lo que les da la gana. Con ciencia, con disciplina y con mucha salivita, entra la conciencia, es decir el comunismo, en una población que ha sido sometida a siglos de dominación imperial.
Volviendo al perifoneador del Cafenol... El tipo en lugar de leer, de memorizar, de transmitir el mensaje que debe ser transmitido, se mandaba cosas de su "propia cosecha". En el ABC decía con coloquialidad: "A: Abaja la fiebre". Claro que arranca sonrisas, pero si es una propaganda repetida ad vomitum es un crimen contra el idioma. Como son un crimen contra el idioma las muletillas: "quebuenoque" y "dealgunamanera".
Lo cierto es que el cafenol no es bueno para todo. No hay bálsamo universal. Lo único que es universal es el método. Un método para analizar, un método para pensar, una metódica forma de observar, una metódica forma de organizar los datos, un método para discutir esos datos, y un método que permite sintetizar (o como llaman los anglo-parlantes: gamelote-less). Y todo ejecutado con la mas metódicas de las objetividades.
El planeta sufre desde hace ya muchos siglos de una enfermedad que no se cura con cafenol, algunos la llaman el capitalismo. Un análisis metódico y objetivo de esa enfermedad puede ser conseguido en libracos de mas de 800 páginas en letra chiquita, o sintetizados en panfletos de poco más de 50 páginas en letras grandotas. Las conclusiones a las que llega basado en el análisis objetivo son, por ahora, irrefutables. No memorices lo que ahí dice. Basta con que aprendas a usar el método y en el camino a manejar con maestría el idioma, la lógica, los fusiles y los camiones de volteo. Nunca esta de más aprender a usar la tapara.
Ese es el objetivo, que algo queda...
Manuel Brito
Un perifoneador de Valencia a quien le tocaba dar la propaganda en vivo y en directo -como se hacía antes-, tenía como característica esencial la misma que hoy adorna a los "conductores" y "productores" de programas radiales transmitidos por Radio Nacional de Venezuela entre 8 am y hasta quién sabe qué horas: ¡el desorden!!! O para ponerlo mirandinamente: ¡bochinche!!! Yo dejo de oir radio a la 1 am (hora del Japón) y la verdad es que nunca había visto (¡por radio!!) tantas moscas juntas en un occipucio. Cumplo con decirlo. Cumplo con manifestar mi pesar por el desorden de ideas ("de alguna manera" hay que llamarlas) y la ristra de muletillas, la incapacidad de completar una idea y de transmitir con certitud un mensaje. Los "comunicadores" irrespetan al idioma y a los usuarios y no hay nadie que se los diga porque entre bomberos no se pisan las mangueras. Ergo, ¡los bomberos son reaccionarios que jode!!!
La radio es el medio más poderoso con que que contamos para enseñar a nuestra gente a manejar el idioma, la lógica, la síntesis. La radio no puede ser manejada por elementos que, basados en amistades y en sentimientos, o en lealtades personales "al líder de la Revolución, el comandante Hugo Rafael Chávez Frías" (la única frase corta que dicen sin meter muletillas), reciban cheques en blanco para hacer lo que les da la gana. Con ciencia, con disciplina y con mucha salivita, entra la conciencia, es decir el comunismo, en una población que ha sido sometida a siglos de dominación imperial.
Volviendo al perifoneador del Cafenol... El tipo en lugar de leer, de memorizar, de transmitir el mensaje que debe ser transmitido, se mandaba cosas de su "propia cosecha". En el ABC decía con coloquialidad: "A: Abaja la fiebre". Claro que arranca sonrisas, pero si es una propaganda repetida ad vomitum es un crimen contra el idioma. Como son un crimen contra el idioma las muletillas: "quebuenoque" y "dealgunamanera".
Lo cierto es que el cafenol no es bueno para todo. No hay bálsamo universal. Lo único que es universal es el método. Un método para analizar, un método para pensar, una metódica forma de observar, una metódica forma de organizar los datos, un método para discutir esos datos, y un método que permite sintetizar (o como llaman los anglo-parlantes: gamelote-less). Y todo ejecutado con la mas metódicas de las objetividades.
El planeta sufre desde hace ya muchos siglos de una enfermedad que no se cura con cafenol, algunos la llaman el capitalismo. Un análisis metódico y objetivo de esa enfermedad puede ser conseguido en libracos de mas de 800 páginas en letra chiquita, o sintetizados en panfletos de poco más de 50 páginas en letras grandotas. Las conclusiones a las que llega basado en el análisis objetivo son, por ahora, irrefutables. No memorices lo que ahí dice. Basta con que aprendas a usar el método y en el camino a manejar con maestría el idioma, la lógica, los fusiles y los camiones de volteo. Nunca esta de más aprender a usar la tapara.
Ese es el objetivo, que algo queda...
Manuel Brito
