2009/07/27

Secuencia lógica

No sé quién heredó el baúl de los recuerdos de Don Simón Rodríguez. O si sus baúles se extraviaron y ya no podremos leer sus trabajos sobre "La Necedad", o sobre "El Abuso del Don". En esta última pieza, el maestro nos indica que llamar de "don" a quien no tiene más dones que ser un lacayo, o un golpista, o un tracalero como los adecos "exiliados", es una de las características esenciales de pueblos sometidos. Pueblos que viven sólo de la forma, de guardar las apariencias, cuando lo que distingue al ser humano libre del ser humano sometido es precisamente tener la capacidad y la valentía de llamar al pan, arepa y al vino, guarapita. Digo para que no clamen al cielo los que nos critican el "eurocentrismo" y el "dogmatismo" de nuestro método de analisis.

Costa Rica y su jueguito bufo de la neutralidad, la hospitalidad y el don pa'cá y el don pa'llá, se me hace que la convierte en la base cívico-militar (sin uniforme) más importante y efectiva que tiene el Comando Sur en toda región para mantenernos a raya. Si algún obstáculo habrá de ser sobrepasado para conseguir la unidad y cooperación de nuestras naciones, este será el ir desenmascarando la forma de hacer política sin compromiso regional de los neciones ticos.

Esta forma de ser necio fue también descrita con maestría (quizas con doctorado) por Simon Rodríguez en su "Tratado de la Necedad". No es de gratis que Rodríguez le mete el pecho a la educacion pública, gratuita y obligatoria en los pichones de república que iban formándose tras la victoria de la guerra independentista. Aunque en sus escritos conocidos sobre el tema no hace referencias explícitas a su tratado, podemos leer el entrelíneas, y en garrapateao que era como escribían estos genios: oculis pelarum est (en el siglo XIX el latin había muerto).

Cuando exige la enseñanza de lógica, de materialismo, y del idioma, lo hace porque está conciente de que el sistema de educación no forma republicanos, sino gente necia. El lo dijo en 182ytanto pero nada ha cambiado en el 2009. Un niño que haya aprendido en la escuela que al árbol le debemos solícito amor, no porque el equilibrio ecológico es importante para el planeta y para todas las especies, sino porque "es obra de dios", terminará siendo un adulto necio. Su capacidad de pensar está mermada por la metafísica, y su capacidad de accionar limitada, enajenada, por los 10 mandamientos, los 7 pecados capitales, y otras bisuterías que cambiaron nuestros antepasados por oro y esmeraldas.

Gente que se educó en la necedad, es la gente que se salta al torera las secuencias lógicas. Es la gente que no acepta ojos bonitos en caras que no sean las suyas, y están dispuestas a todo con tal de prevalecer con su necedad. Para ellos la ciencia es cosa aburrida. Un ejemplo claro de lo que digo es la Facultad de Estudios Intelectuales de la Universidad Nacional Aporrea. Allí todo los
alumnos -que no se metan con las autoridades- puede publicar sus trabajos de "investigación", sin pasar por ningún tipo de escrutinio, sin ningún tipo de evaluación, que permita mejorar los trabajos que valgan la pena, o desechar las barrabasadas que son producto de las ganas de hablar paja sobre lo que no se tiene ni puta idea. Y es que, hasta en la peor de las situaciones, uno comenta con alguien cercano sobre lo que esta por publicar, a ver si lo mejora, si la secuencia
lógica esta bien, si se entiende...Ni siquiera ese esfuercito hacen. Resultado: todos piensan que pasaron el curso y que ya son intelectuales. Que son plumas burda de inteligentes. Por ello, mientras más escriben y más les publican, más necios se ponen.

Tener que discutir con necios de ego hiperdesarrollado imposible de mantener dentro del cuero, o descuidar lo importante para atender a las payasadas de los necios, es precisamente el trabajo que nos quería ahorrar Simón Rodríguez hace ya cerca de 200 años. Algún día llegaremos, maestro. Algún día. Por lo pronto habrá que seguir dándoles con el tobo a los necios y necias de la clase media (aquende la talanquera) con acceso banda ancha a la red de redes, que con actos de magia intentan descalificar la crítica a los funcionarios (en funciones, cobrando sueldo) que no hacen trabajo revolucionario (¡porque no les da la gana!!!), o la crítica a los "revolucionarios" que se han dedicado a burlarse de Honduras, su pueblo y sus líderes, con el argumentazo de que no estamos en el terreno de juego. Y no hemos estado en el terreno de juego por 27 años y es mejor que no estemos porque, yo al menos, no me ando por la ramas a la hora de sacar del camino a los necios y a sus necedades.

¡Agradezcan la lejanía!!!, que algo queda...


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Manuel Brito

http://moliendo-cafe.blogspot.com/