Quien quiera leer el contexto de la frase sacada de contexto puede dirigirse y quedará contento: http://www.aporrea.org/
Desde hace como 2600 lunas, y no más porque no habia nacido, escucho a los maestros del achantaje, esa pusilanimidad en pasta que engrosa sus papadas en los terrenos de la izquierda complaciente (es decir, la centro-derecha militante), acusar de "stalinista" a todo aquel al que se le ocurra decirles que son unas cucarachas, o peor, que les alcance un espejo. A esos, los más pendejones pero bien ubicados, es a los que se les debería demostrar en un programa de televisión del estilo "Reina por un día" lo que quiso denunciar Nikita en el XX Congreso del Partido (Febrero de 1956). Un solo día, con sus 24 horas diurnas y su 24 horas nocturnas, donde el acusador reciba tratamiento especial por parte del aparato de represión y censura, opus magno y por partes iguales de stalinistas y trotskos (¡épale presidente Gonzalo!); es decir, los comunistas que sedejarondeso después que le vieron el queso a la tostada.
A estos bichitos, maestros del achantaje, no se les puede tocar ni con el pétalo de una rosa azul. Sería un motivo para gritar con histeria y con ánimos de hacer chantaje: stalinismo, stalinismo. Este grupillo de sifrinos, por nacimiento o por naturalizacion (¡que son los peorcitos!), son gente extremadamente ambiciosa en términos de bienestar personal, individual, egoistial. Y nada más jodido para un ambicioso que se dedicó toda su vida a forjar una red podrida de complicidades y amiguismos que le permitiera estar siempre en la pomada, que llegue un pueblo en armas (¡que nadie se equivoque!!) y mande parar.
Y como así.., que algo queda...
Manuel Brito